Llevamos unos días que no dejamos de hablar de una saga de combate. Una saga que llegó a su pleno esplendor hace casi más de 16 años, y que por circustancias, se vió de capa caida en sus siguientes lanzamientos hasta... hoy. Esta historia os sanará, y es que todo en esta vida es un ciclo. No, no se trata de Street Fighter IV… sino de su eterno rival: Mortal Kombat.
Retrocediendo unos años, todos recordaremos aquellos momentos que pasamos frente a nuestras consolas de 16bits la Super Nintendo y la Mega Drive. Por aquellas fechas, los juegos se estaban popularizando y dos sagas salieron a la luz con estilos diferentes pero muy a la par a nivel de éxito. Si bien es cierto que Mortal Kombat tuvo menos acogida que Street Fighter, se traba de una de las sagas más sanguinarias y bestiales que podíamos ver en una consola. Su estilo, con personajes foto realistas y cuya rapidez era bastante superior a la del juego de Capcom, atraía a los mas mayores y amntes de juegos divertidos por su exageración.
El éxito de esos mares de sangre y de esos golpes finales para acabar con los contrincantes (los Fatality) fueron tan grandes, que surgieron secuelas tal y como ocurría con nuestros amigos Ryu y Ken. Se lanzaron Mortal Kombat II, III y Ultimate Mortal Kombat. Cada cual iba aumentando en su número de personajes, mejorando los movimientos, etc.
El tempo pasó y tras algunos intentos fallidos, películas de pésima calidad y la caída de Midway, esta licencia quedó medio olvidada hasta este año. Por parte de Warner Bros Games, nos llega Mortal Kombat, un juego resucitado, limpio, divertido, original, rápido, e impecable. La saga parece haber resucitado.
Al encender la consola y arrancar el juego, veremos en el menú principal a Scorpion y Sub-Zero, sin lugar a dudas los personajes más emblemáticos de la saga, y al pulsar START, Scorpion lanza un puñetazo que destroza y arranca los dientes de Sub-Zero. ¡Bienvenidos a Mortal Kombat!
Navegando un poco por los menús, uno se da cuenta de la multitud de modos que ofrece este juego. Tenemos modos en solitario, pero podremos jugar también entre 2, 3 o 4 jugadores en una misma consola. Además, existe una opción online que nos permite medirnos a cualquier rival del planeta. Obviamente el modo en solitario es el más completo que nos permitirá tanto jugar en un modo arcade, como en el modo historia y un sinfín de opciones más. Por los 70€ que vale el juego hay diversión asegurada.
Ahora bien, no de opciones se nutre un jugador, ¿que ocurre con el GamePlay? Para probarlos basta con meterse en el modo de un jugador y veamos la cantidad increíble de personajes que podremos elegir. Los amantes de la saga no podrán impedir que se les caiga una lagrimilla al ver como sus personajes de aquel entonces han crecido y han ganado en detalle: Sonia Blade, Jonny Cage, Kane, Kitana, Reptile, Sektor y muchos más serán parte del plantel de personajes principales. Impecable en este aspecto.
Seleccionamos a nuestro favorito y entremos en el juego. Durante la carga del combate, veremos como, al igual que ocurría en las anteriores entregas, podremos introducir ciertos códigos secretos que nos permiten desbloquear músicas, jugar sin cabeza, etc. Otro aliciente más a tener en cuenta.
Los combates empiezan y lo primero que he de decir es lo sorprendente que es la fluidez de los combates. Además, encadenar combos está al alcance de casi cualquiera, ahora si lo quieres hacer bien, necesitarás destreza en tus manos para poder acabar con todos los enemigos, pero lo más curioso al margen de las presentes Fatality que podremos desencadenar al final del combate, es la brutalidad de los golpes especiales que desencajarán la mandíbula de los contrincantes, aplastarán las costillas o romperán los huesos en articulaciones imposibles. La brutalidad es tal y que al principio duele, pero al final hay que tomárselo a risa. Eso si, ¡almas sensibles abstenerse!
Los personajes están diseñados en 3D con el motor de Unreal, pero al igual que ocurre en Street Fighter IV, los combates se desarrollarán de forma bidimensional. Un acerto absoluto para asemejarse al máxima sus versiones clásicas.
Pero eso no es todo ya que todos los personajes se irán degradando según los golpes que hayan recibido, así que les veremos inundados de sangre conforme vaya transcurriendo el combate. Algo muy gracioso y que le suma espectacularidad al juego. Además, no hay que olvidar que podemos interactuar con ciertos escenarios. Con este juego, los desarrolladores de Netherrealm se han lucido.
Obviamente tras habernos pasado el juego con todos los personajes, podremos seguir con el modo historia y sino con los modos multijugador donde Mortal Kombat recoge su máximo esplendor. El juego es divertidísimo y espectacular.
¿Entonces que tiene de malo este juego? - os preguntaréis. Pues prácticamente nada. El único fallo que le veo a Mortal Kombat son que los diseños de los personajes son demasiado parecidos entre si y apenas existe diferencia entre por ejemplo Sektor y Scorpion, los combates son menos tácticos que en Street Fighter y la carátula de la portada que parece un juego de lo más cutre que existe. Por lo demás, lo considero a día de hoy la referencia en materia de combate y de los mejores 70€ invertidos en un juego. Para más inri me atrevo a decir que lo considero incluso mejor que Super Street Fighter IV. ¡Enhorabuena!
NOTA FINAL:
9,7/10